El pasado lunes 16 de marzo de 2015, se hizo historia en la Escuela Juan Ramón Jiménez. Por primera vez, un grupo de estudiantes, acudieron al llamado de las audiciones, y desde hace tan poco como mes y medio, se ha organizado el Grupo de Teatro Estudiantil Juan Ramón Jimenez. Doce valientes se atrevieron a iniciar la travesía aventurera. Solo una estudiante con experiencia actoral; los demás, ninguna. Pero al pasar por la lectura y análisis de la pieza; conocer el libreto adaptado a la actualidad; vivir los ensayos rigurosos; el reto para la memoria; las continuas repeticiones, consejos, y a veces hasta regaños, los chicos se fueron adentrando al mundo mágico del teatro. ¡Y llegó la noche del estreno! Algunos temblaban tras bastidores. Sus miradas me buscaban para sentir seguridad. En esos momentos, yo era la madre de todos ellos, y creo que lo supe hacer bien. El balance entre rigor y bondad. Lo que ellos necesitan realmente. ¡Y la noche fue mágica! Entre pánicos y temblores, salieron adelante. Escuchaban las risas del público, las expresiones de sorpresa, los silencios y hasta suspiros. Entonces las reacciones de la audiencia les dio fuerzas. Vieron que al público le gustaba lo que veían y escuchaban. La seguridad los arropó, y la magia copó el escenario. ¿El resultado? La foto de este artículo lo dice todo. ¡Bravo a los estudiantes de Teatro de la Juan Ramón y que esta sea la primera de muchas! Un gran honor dirigirlos por la ruta del arte y las humanidades. Un honor guiarles hacia la sensibilidad. ¡Gracias muchachos! El pasado lunes 16 de marzo, desde las 7:30 de la noche, se hizo historia en el Teatro Braulio Castillo de Bayamón.
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